Fabrica tu propia tostadora

Todos hemos oído hablar sobre el proceso de producción e intuimos que los productos fabricados de tal forma resultan mucho más económicos que aquellos que se realizan de manera artesanal. Para comprobarlo vamos a ver cómo se podría fabricar una tostadora manualmente…

Entendemos proceso de producción como el conjunto de actividades que se realizan para la fabricación de un producto. El proceso de producción y su planeamiento resulta crucial para conseguir una optimización de recursos y lograr un alto beneficio por un coste mínimo. Para llevar a cabo este proceso, el uso de maquinaria, materia prima y recursos humanos no es suficiente. Se necesita una organización para producir, distribuir la producción y pensar estrategias para ser más competitivo.

Si nos planteásemos cómo llevar a cabo un proceso tecnológico, las fases serían las siguientes:

• Hacer una lista con las actividades necesarias para fabricar ese producto
• Ordenarlas secuencialmente
• Fijar tiempos de realización de cada actividad
• Establecer puntos de control de calidad en los procesos más problemáticos
• Expresar gráficamente las fases y actividades

Una vez regularizado el proceso de producción, el siguiente paso sería la aplicación de lo que se conoce como proyecto I+D+I (Investigación, desarrollo e innovación), que permite a la empresa aumentar su rentabilidad a medio y largo plazo. Consiste en el análisis profundo de la tecnología utilizada, el estudio de la posición de la empresa frente a sus competidores y las estrategias alternativas para llevar a cabo una serie de mejoras.

Para concienciar a la gente del trabajo que existe detrás del proceso de producción de cualquier producto manufacturado, propongo un video en el que se muestra cómo sería la fabricación de una tostadora sin seguir un proceso de fabricación, es decir, a través de la fabricación manual:

(Vamos a perdonar el hecho de que sitúe el Río Tinto en Portugal cuando todos sabemos que está en Huelva…)

Como podéis observar, la obtención de la materia prima se hace mucho más difícil, la ausencia de máquinas no permite la elaboración de piezas regulares, no se controlan los tiempos de las diferentes actividades, la seguridad brilla por su ausencia… por no hablar del precio por el que se distribuiría dicho producto, que no sería nada competitivo en el mercado. Además no se pueden vender bienes que supongan un riesgo mortal para el consumidor pero, en caso de tener algún tipo de riesgo, el usuario debe conocer el mismo para decidir si a pesar de éste quiere comprarlo o no.

La imagen final de la tostadora junto a otras en la estantería de los grandes almacenes es surrealista, me hace reflexionar sobre cómo sería posible vender más en el mercado. Conseguir nuevos clientes o quitárselos a la competencia supondría mejorar la calidad de la tostadora notablemente. Así que, a juzgar por las imágenes… ¿qué crees que sale más barato, un producto comprado al por mayor o un producto artesanal?